Galletas en el Femenino

El Gimnasio Femenino cuenta con múltiples tradiciones que por generaciones han sido características de cada promoción que se gradúa del colegio. Desde el show de muñecas hasta bandas y barras, las gimnasianas deben poner todo su esfuerzo en producir grandes proyectos que representen los valores de la comunidad. Lamentablemente, estas tradiciones han tomado diferentes sentidos para las estudiantes a medida que crecen, especialmente la tradición de galletas.

Por un lado, unas estudiantes afirman que la tradición de las galletas se vuelve una cosa más en su lista de pendientes como promoción y una manera de recoger fondos. Adicionalmente, el estrés de la planeación de esta puede generar desacuerdos y

discusiones dentro de las promociones, generando un ambiente negativo. Por otro lado, aunque las estudiantes venden la idea de amistad y unión junto a las galletas, algunas afirman que esto es una estrategia para vender y recoger más fondos para la promoción. Además, un pequeño grupo de estudiantes más jóvenes creen que la tradición de las galletas se basa en la popularidad. Relatan historias de cómo a una niña del salón le llegaban 30 galletas, cuando a ella le llegaba solo una. Otras estudiantes nuevas reportan sentirse excluidas cuando, debido a que aún no habían consolidado amistades, no recibían ni una galleta ese día.

Sin embargo, muchas gimnasianas recuerdan el día en el que se entregan las galletas como una experiencia maravillosa. Recuerdan jugar amigo secreto, contar cuantas galletas recibían y anhelaban llegar a décimo para que ellas fueran las que repartieran las galletas. Para muchas, la tradición de galletas significa una oportunidad de mostrarle a las personas a su alrededor cuánto las quieren o cuánto aprecian que estén en sus vidas. Esta tradición es una manera de unir a la comunidad gimnasiana como una y crear recuerdos únicos e inigualables. Adicionalmente, recibir galletas crea y fortalece lazos entre amigas y profesores, ya que nos ayuda a recordar la importancia de valorar a las personas que nos rodean. Para muchas gimnasianas, incluyendo a las exalumnas, esta tradición representa momentos memorables de estudiar en el Gimnasio Femenino.

Por lo tanto, la tradición de galletas ha sido una fuente de experiencias enriquecedoras a pesar de que algunas estudiantes tienen reservas contra esta. La tradición de las galletas ha sufrido una desvalorización por parte de las estudiantes, razón por la que es importante rescatar el verdadero sentimiento e importancia de esta tradición. Debemos mirar en nuestro interior, reflexionar y pensar qué hace especial a una experiencia. Así garantizaremos que nuestras galletas generen sonrisas y cariño en lugar de experiencias incómodas.

Por: Laura Mejía y Sara Gabriela Encinales